miércoles, 17 de mayo de 2017

Palabras:



Hachas
a cuyo golpe la madera resuena,
¡y los ecos!
Ecos que se desplazan
desde el centro, como caballos.

La savia
mana como lágrimas, como el
agua que se esfuerza
en recomponer su espejo
sobre la roca

que gotea y da vueltas,
cráneo blanco
carcomido por verdes herbosos.
Años más tarde
me las encuentro en el camino...

Palabras secas y sin jinete,
el ruido infatigable de los cascos.
Mientras,
desde el fondo del estanque, fijas estrellas


rigen una vida.



En el primer párrafo está comparando unos golpes provocados por una hacha como si fueran el trotar de un caballo sobre madera.
"Craneo blanco y carcomido por los verdes herbosos" puede referirse a el craneo de un esqueleto después de referirse a las lagrimas como un manantial o algún sitio de donde cae agua.
Y por último con "fijas estrellas que rigen la vida" suponemos que son diferentes caminos que se pueden escoger para vivir, que llevan a diferentes futuros pero sobretodo se ve a si misma, en su reflejo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario